Antes de ponerse al volante, el conductor no solo debe dominar el arte de conducir y aprender las reglas de la carretera, sino también saber cómo mantener una conversación con la policía de tránsito, es decir, ser conocedor de este asunto.
Entonces, el oficial de la policía de tránsito dio la orden de detenerse. Para empezar, el conductor debe asegurarse de que sea su automóvil el que esté detenido. En caso afirmativo, debe detenerse en cualquier caso en el lugar indicado por el oficial de policía de tránsito. Asegúrese de mantener la calma y no preocuparse. Recuerda siempre que la preocupación solo duele. Cuando el conductor está preocupado, comienza a cometer acciones incontrolables, y esto puede llevar a que sea más fácil para el policía de tránsito multarlo.
Deberes del oficial de policía de tránsito al detener el automóvil
¿Y qué está obligado a hacer el inspector después de la orden de detener el vehículo? Primero, debe presentarse. En este caso, debe nombrar su puesto, título y apellido. Después de eso, el oficial de policía de tránsito está obligado a nombrar el motivo exacto y el propósito de detener el automóvil. Y solo después de todo lo anterior, tiene derecho a exigir al conductor que presente documentos para su verificación.
Conocer tus derechos es poder
Después de detener el automóvil, el conductor tiene derecho a no salir de su automóvil. En este caso, la conversación con el policía de tránsito se realiza a través de la ventana abierta del vehículo. El inspector tiene derecho a exigir al conductor que salga del automóvil si hay sospechas de enfermedad o intoxicación; cuando necesita eliminar un mal funcionamiento técnico de un automóvil; si es necesario, inspección personal o inspección de la carga o un automóvil; para ayudar a otros usuarios de la carretera o agentes de policía. El conductor tiene derecho a realizar una grabación de video o sonido de la conversación con el inspector.
Cómo llevar una conversación
Al hablar con un oficial de la policía de tránsito, es muy importante mantener un tono benévolo, seguro y tranquilo, evitando la indignación, la mala educación y las palabras obscenas. No le diga a un compañero de trabajo que tiene prisa. La experiencia demuestra que es un grave error que un conductor haga alarde de sus conexiones con la dirección. Muy a menudo, esto solo conduce a un deterioro en la actitud del inspector hacia el conductor.
Si el conductor no conoce las leyes, no las apele. Es mejor pedirle al inspector que le explique el estado de derecho, que en este caso tiene lugar. Esto atraerá al empleado y contribuirá al desarrollo de una conversación amistosa. Tampoco es necesario ofrecer un soborno, especialmente si el conductor no cometió la infracción. Nunca tenga miedo de reunirse con los agentes de la policía de tránsito.